La
procesión con la Virgen se inició sobre las 12,30 de la mañana,
acompañada por las hermandades invitadas y por un numeroso grupo de
hermanos y devotos que vitorearon a la Virgen del Rosario a lo largo
de su recorrido.
La
entrada en la parroquia de San Martín tuvo lugar pasada las 3 de la
tarde, pasando posteriormente a la casa hermandad, donde se respiró
un alegre ambiente de convivencia que se prolongó durante todo el
día.